3 de mayo de 2021

Vacuidades

Los domingos son como cuando tienes un chocolate y lo comes de a poquitos
procrastinando la manoesada idea de que en algún momento, tendras que tomar el último trozo y la nostalgia se apoderará de ti
Pero allá ves, mientras no sea el último (todavía) vas disfrutando con ahínco sin mirar más.
O pienso también que los domingos son como las verduritas que se te quedan en el fondo del plato y que en algún momento una de ellas sera la última y tocará levantarla con la cuchara.
No sé por qué relaciono el domingo con la escena nostálgica que me da elegir una cosa y dejar otra.
O como cuando el gato se me viene al regazo y de manera tácita, con los ojos abiertos como plato me dice que él también se siente en un bucle de saudades por ser domingo, para algunos último y para otros primer día de la semana
Pero que para la gente como yo
Para la gente como uno
el domingo siempre será permanecer bajo la sombra de algún cansado cerezo.